“Hemos dicho que nos hemos familiarizado con todas las partes y principios necesarios para recibir la fuerza de la vida, con una amplia habitación para poder llevar
a cabo el trabajo bajo la confianza de la perfección Divina. Antes de su unión una ley suprema, conocida como Afinidad, empieza a cumplir con su trabajo perfecto de preparar los líquidos y
repartirlos a su oficina correspondiente, cuya sabiduría viene de la universidad del mismo Dios… obedece y sigue las formas y leyes tal y como han sido escritas en la pizarra del gran Arquitecto
de todas las formas y estructuras en las que habita la vida.”
AUTOBIOGRAFÍA