Muchas veces durante el embarazo tu salud se ve alterada. Tu cuerpo, con todo lo que ya ha vivido, se prepara para recibir a un nuevo ser y darle ese nuevo espacio que necesita para crecer en salud. Por tanto, lo primero es tu salud, ¿Cómo estás contigo misma a todos los niveles? Corporal, mental y espiritual, tu camino de vida. El cómo te sientes contigo, lo sentirá también tu bebé y le afectará en su salud y desarrollo global, determinando así el terreno en el que va a crecer y vivir durante todo tu embarazo. Piensa en el terreno en el que crecerá, y trata de ofrecerle un terreno y espacio corporal lo mejor posible para que pueda vivir en Salud todo este tiempo. Es así, que tu estilo de vida y el cómo te cuidas que repercutirá en tu salud, pero también en el de ese bebé que crece en tu interior.
Es gracias a que tu te cuidas que ese bebé recibe los mejores nutrientes físicos y emocionales,
y puede crecer en salud.
Pero cuidarte implica que a veces necesitas ayuda porque hay cosas a las que tu sola no puedes llegar. Tu cuerpo ha ido acumulando tensiones físicas a lo largo de tu vida, repercutiendo así sobre la relación de tu cuerpo, y en especial sobre su movilidad. Pequeñas tensiones que como osteópata puedo percibir, están afectando a la calidad de las informaciones sanguíneas y nerviosas que recibís tú y tu bebé, afectando así a vuestra salud. Como osteópata percibo tensiones con mis manos en tu cráneo, columna vertebral, pelvis y sistema digestivo entre muchas más, que están afectando a tu sistema nervioso y hormonal, afectando así a vuestra salud.
Además, tu cuerpo consciente es una biblioteca llena de vivencias físicas y emocionales que a lo largo de tu vida se han ido almacenando creando así una máquina vital que se relaciona con su entorno desde una memoria consciente que vive en cada célula de tu cuerpo. Tu cuerpo es lo que has vivido, y eso está ahí repercutiendo en la calidad del espacio que le ofreces a tu bebé para crecer en salud.
El efecto de todo esto son los síntomas y el malestar que sentís tú y tu bebé. Esto son solo unos ejemplos;
Todo esto son los efectos de las tensiones que como osteópata encuentro en tu cuerpo con mis manos, y que con toda seguridad están ahí hace ya mucho tiempo, aunque se expresen ahora.
Tu salud repercute en cómo tu cuerpo y tu mente llegan a ese momento del parto, donde además, tu buena salud también repercute en tu buena relación con tu pareja, ya que ambos le dais ese sostén que vuestro bebé necesita para salir a este nuevo mundo respetando la fisiología del parto y naciendo así en salud.